Las hipotecas superaron las 400.000 firmas en 2024 con el importe medio más alto desde la burbuja
La estadística de hipotecas sobre viviendas avanzó un 30% en diciembre en su sexto mes de avance consecutivo y mucho más vigoroso que el de noviembre. Las 32.249 operaciones que se cerraron en el último mes del año confirman que 2024 superó de nuevo la cota de las 400.000 firmas que perdió en 2023. En total, durante los 12 meses se firmaron 423.761 hipotecas, un 11,2% más que el ejercicio anterior tras anotar el mayor avance anual desde 2021 y el segundo mayor desde la burbuja.
Los datos que actualiza este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE) indican que la firma de hipotecas sobre viviendas recuperó en 2024 el tono positivo y la cota de los 400.000 préstamos, como ya ocurrió en 2022 y 2021, tras desplomarse un 17,9% en 2023, hasta el entorno de los 381.000. El impulso, sin embargo, deja el total por debajo de la anotada en 2022, cuando se sobrepasaron los 464.000 préstamos.
Juan Villén, director general de Idealista/hipotecas, explica que "el año 2024 se cierra en diciembre manteniendo el fuerte crecimiento en nuevas hipotecas que venimos observando en los últimos meses. La fuerte demanda y el apetito de los bancos por el nuevo crédito están detrás de estas cifras, que se mantendrán a inicios de 2025, seguramente con más bajadas en los tipos de interés formalizados".
El momento de tensión que vive el mercado inmobiliario por la alta tensión entre oferta y demanda se deja ver en los precios y en los importes de los préstamos. Según los datos de Estadística, el importe medio de las hipotecas concedidas para vivienda subió un 2,7% en 2024, hasta los 145.673 euros, la cifra más elevada desde 2007.
Hubo algo de respiro en el tipo de interés medio. En el último mes del año se situó en el 3,25%, por debajo del 3,28% de noviembre para los préstamos, con un plazo medio de 25 años. El nivel es más bajo que el de un año atrás (en 2023 cerró en el 3,33%) pero sigue sin perder la cota del 3% sobre la que lleva 20 meses consecutivos.
El 36,6% de las hipotecas sobre viviendas se constituyeron el pasado mes de diciembre a tipo variable, mientras que el 63,4% se firmaron a tipo fijo, el porcentaje más alto de todo el año. En el año, las hipotecas fijas supusieron el 58,8% del total, el porcentaje más bajo desde 2020.
En valores mensuales (diciembre de 2024 sobre noviembre del mismo año), las hipotecas sobre viviendas se desplomaron un 16,2%. "La caída mensual responde a una moderación lógica, ya que diciembre siempre es un mes inestable por su naturaleza navideña, en la que se producen parones", analiza María Matos, directora de Estudios de Fotocasa, que no resta empaque al resultado anual: "El incremento de la tasa interanual consolida el cambio de ciclo hipotecario impulsado por la desescalada de los tipos de interés, la caída del euríbor -cerró 2024 por debajo del 2,5%- y los descuentos que el propio mercado adelanta. Una situación completamente contraria al año anterior". Para la experta, el escenario implica "el fin de una etapa de alta tensión en la que el mercado hipotecario vuelve a recuperar su dinamismo debido a la mejora en las condiciones de los préstamos".
Pronóstico para 2025: precios más altos
El cambio en el mercado hipotecario ante la desescalada de los tipos de interés y la flexibilización de las condiciones de acceso al crédito hipotecario que ofrecen las entidades bancarias alargará la lucha hipotecaria entre las entidades bancarias para captar clientes y abonará el terreno para que el tipo fijo vaya recuperando parte del terreno perdido a lo largo de 2025.
En este sentido, el mercado apunta a que el Banco Central Europeo (BCE) continúe con los descuentos de tipos hasta situarlos cerca del 2% durante el primer semestre del año, lo que permitirá buscar la estabilización y acomodación del mercado en la segunda parte. Sin embargo, Matos señala que "el giro de la política monetaria del BCE hacia una postura más flexible tendrá un impacto considerable en la evolución del mercado inmobiliario en España" ya que "la reducción de los tipos seguirá provocando indirectamente el aumento en los precios de la vivienda al atraer más demanda de compra al mercado".